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PENTECOSTÉS 2013
PENTECOSTÉS
Desde hace unos años parece que los cristianos, algunos por lo menos; vamos mostrando un poco más de interés por conocer el significado de nuestras principales fiestas o tiempos litúrgicos: Adviento, Navidad, Cuaresma, Pascua, Pentecostés…
Para los judíos, la fiesta de Pentecostés, era llamada también “Fiesta de la Siega» (Ex. 23, 16), o «Fiesta de las Semanas» (Ex. 34,22). La llamaban de Pentecostés, porque se celebraba cincuenta días (eso significa en griego Pentecostés) después de la Pascua.
Los judíos relacionaban esta fiesta con la revelación de Dios en el Sinaí; y recuerda la Alianza de Dios con el hombre, y en especial, la aceptación por parte del creyente de la Revelación recibida en el Sinaí.
Pentecostés
Para los cristianos, esta fiesta adquiere un nuevo significado: la celebramos también cincuenta días después de la Pascua de Resurrección, cumbre de la Revelación de Dios en su Hijo Jesús.
Significa que los cristianos acogemos, en el Espíritu; la Revelación, formando así la comunidad de la nueva alianza.
Esto supone y significa la inauguración del Tiempo del Espíritu, es decir de la Iglesia. J. Ignacio Ciordia
CELEBRACIÓN PENITENCIAL CON LOS NIÑOS DE 2º ABRIL 2013
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FELIZ PASCUA 2013
Amigos: ¡Aleluya! ¡Felicidades! ¡Enhorabuena! Todos los saludos son buenos y todos son pocos para expresar el gozo de la Pascua, del paso de Cristo de la muerte a la vida.
A través de estos días santos, hemos vivido en nuestra pequeña comunidad el mayor acto de amor que se puede tener, que es dar la vida por los amigos, por los humanos, de un Dios que parece no sabe otra cosa que amar; que amar gratuitamente al ser humano que Él creo.
¡Qué asombroso beneficio de tu amor por nosotros! ¡Qué incomparable ternura y caridad! ¡Para rescatar al esclavo, entregaste al Hijo!, nos dirá el pregón pascual.
Amigos, gritar aleluya, hurras y cantos de victoria a la resurrección del Señor es, gritarlos a nuestra propia resurrección; porque “los que por el bautismo nos incorporamos a Cristo, fuimos incorporados a su muerte y a su resurrección”. Lo ha dicho S. Pablo. Y ha sacado las consecuencias: “Nuestra vieja condición pecadora ha sido crucificada con Cristo. Y si hemos muerto con Cristo, creemos que también viviremos con Él. Consideraos muertos al pecado y vivos para Dios en Cristo Jesús, Señor nuestro”
Sí, amigos, Cristo ha resucitado y ha cambiado la historia del mundo de arriba abajo. Vivamos nuestra fe en el resucitado con gran alegría. Felicitemos con entusiasmo a nuestros hermanos y hagamos de esta verdad, una verdad de esperanza. Un abrazo a todos en Cristo Jesús.
Julián